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Los teléfonos no rastreables se refieren a la capacidad del teléfono de ocultar su geolocalización real mostrando su ubicación en un lugar distinto de donde se encuentra el teléfono en realidad. Algunas aplicaciones para niños disponibles en Google Play Store o Apple Store utilizan conexiones de datos y servidores de terceros y muestran una ubicación GPS falsa en otra parte del mundo, lo que no solo es estúpido, sino también peligroso cuando se trata de hacer cumplir la ley:

No se puede engañar a las autoridades con este tipo de aplicaciones, porque la localización GSM real utilizada por las fuerzas del orden para rastrear un teléfono móvil revelará su ubicación real a pesar de la VPN.

Conceptualmente, el rastreo de localización suele malinterpretarse o confundirse con el rastreo de localización GPS:

• Los teléfonos móviles no son rastreados por el módulo GPS incorporado, a menos que una aplicación espía instalada en el teléfono correspondiente recopile y envíe los datos GPS a un servidor donde puedan ser vistos por los atacantes.
• El módulo GPS no transmite ninguna señal. Un módulo GPS no es más que un receptor de radio, como su radio. Un receptor de radio no puede ser rastreado, por supuesto, porque es un dispositivo completamente pasivo. Lo mismo ocurre con el módulo GPS de su teléfono móvil. Por supuesto, el GPS de un móvil envía datos de localización a otras aplicaciones que tengas instaladas en el teléfono, aplicaciones que pueden ser explotadas remotamente para espiar tus datos de localización GPS. Pero en la vida real, esto no ocurre demasiado a menudo, ya que muy pocos actores como la NSA tienen este privilegio.
• Algunas grandes empresas de marketing también utilizan algunas aplicaciones de seguimiento que los usuarios de teléfonos instalan en sus propios teléfonos (servicios basados en la localización), o distribuyen aplicaciones camufladas (similares al malware) que recopilan información de localización del teléfono del usuario junto con otros datos.
• Hay muchos teléfonos móviles que no disponen de función GPS (no tienen módulo GPS). Pero eso no significa que estos móviles no puedan ser rastreados. El rastreo de la ubicación de móviles no nació al mismo tiempo que los smartphones, ya que es tan antiguo como los propios teléfonos móviles. En la mayoría de los países, si un teléfono silencioso no puede rastrearse, se prohíbe inmediatamente su venta y uso por razones obvias.

El seguimiento de la ubicación no utiliza datos GPS, sino datos de conexión. Existen 4 opciones principales cuando se trata del seguimiento de la ubicación por parte de agentes estatales:

1. Vulnerabilidades SS7. En este escenario, no es el teléfono el que es atacado, sino las vulnerabilidades de la red SS7 las que ayudan al atacante a averiguar la ubicación de tu teléfono. El atacante averigua la ubicación de la torre celular a la que está conectado su teléfono. Por lo tanto, es bastante fácil localizar su teléfono. Ejemplo: ULIN.
2. Con ayuda directa del operador de red, que proporciona los datos de localización del teléfono objetivo. Las técnicas de triangulación (también conocidas como multilateración) pueden determinar la ubicación de un teléfono móvil con una precisión de hasta 3 metros, mejor que la mayoría de los rastreadores GPS.
3. Utilizar un interceptor GSM, que tiene capacidades de seguimiento de la ubicación y a veces utiliza una antena DF para encontrar la ubicación de un teléfono móvil forzando el canal de localización del teléfono para transmitir continuamente una señal.
4. Mediante la instalación remota de aplicaciones espía, como FinSpy.

Los dos primeros pueden realizarse a distancia. El tercer método requiere cierta distancia al móvil objetivo (hasta 5 km).

Cuando se habla de teléfonos móviles ilocalizables y llamadas telefónicas ilocalizables, depende bastante de la perspectiva desde la que se mire.